Fernando Mier

Cuarenta años después del holocausto del Palacio de Justicia, el poder judicial sigue «BAJO ATAQUE»: Jorge Urieles Leal

Apenas trascurrían los 06 primeros días del mes de noviembre de 1985, cuando a eso de las 10:30 am, en la ciudad de Bogotá, en pleno corazón del Poder de la República, el grupo “subversivo” movimiento 19 de abril “M -19”, se tomó de forma violenta y sanguinaria, el edificio que entonces, al igual que hoy, ha sido el templo sagrado del poder judicial, a quien por antonomasia, se le ha encomendado históricamente, la custodia del estado de derecho, a fin de que prevalezca la democracia como regla expedita para protección de la vida, la libertad y la propiedad, como únicos derechos connaturales del hombre y del ciudadano, capaces de garantizar que la nación alcance un orden justo.