En un giro inesperado, Leonardo Alfonso Pérez Medina ha dimitido de su puesto como director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en Magdalena, solo tres meses después de su nombramiento.
La renuncia se produce en medio de un escándalo por la adjudicación directa de contratos que superan los 42 mil millones de pesos, actualmente bajo la lupa de la Procuraduría General de la Nación.
Pérez Medina, enfrenta acusaciones de irregularidades contractuales, a lo que se suma sus cuestionamientos cuando dirigió las regionales de Boyacá y Sucre. A pesar de no mencionar explícitamente estas acusaciones en su carta de renuncia, se refirió a “denuncias cizañeras y dañinas” que, según él, han mancillado su honor y el de su equipo, llevándolos a un estado de desánimo.
La dimisión de Pérez Medina se atribuye a lo que él describe como “señalamientos infundados”, que han generado un impacto negativo en su vida laboral y personal.
El caso sigue en desarrollo mientras la comunidad espera claridad y justicia en las acciones del ICBF Magdalena.