El eco del estadio Palogrande resonaba como un corazón ansioso, mientras la tarde caía y la angustia se posaba sobre los aficionados del Junior.
La emoción de un partido desgastante, lleno de giros y sorpresas, parecía esfumarse como el humo del aliento en una fría noche de invierno. Sin embargo, en el último minuto, cuando el tiempo parecía ser un aliado del desánimo, el ‘Tiburón’ sacó fuerzas de donde no parecía haberlas y logró un empate inesperado contra el Once Caldas.
Desde el arranque del juego, el equipo local entró con ímpetu y tomó la delantera rápidamente. Apenas habían transcurrido tres minutos cuando Jefry Zapata, como un rayo fulgurante, perforó la red con un taconazo improvisado que dejó a Santiago Mele sin opción.
El grito de júbilo de los hinchas del Once Caldas resonó en el aire, mientras el color rojiblanco se comenzaba a deprimir. Pero Junior, fiel a su historia de lucha y perseverancia, no estaba dispuesto a dejarse llevar por la corriente.
Edwin Herrera, con un disparo certero a los 33 minutos, reavivó las esperanzas de los barranquilleros, igualando el marcador. Pasajes de brillantez emergieron entre las sombras. Sin embargo, la primera parte terminó con un nuevo golpe: Dayro Moreno, con un remate fulminante, devolvió a los ‘blancos’ a la delantera justo antes de irse al vestuario.
El segundo tiempo estuvo cargado de tensión. Junior se anuncia más agresivo y buscando el arco del Once, logrando varias opciones claras de gol, como la del central Olivera al minuto 62 y otra al 70 después de un cobro de esquina que cabecea Nicolas Salazar a las manos del porte Aguirre.
Junior sufría, no encontrar el empate sería alejarse de la posibilidad de seguir peleando la clasificación del cuadrangular B de la Liga BeTplay.
Así, en el último suspiro, minuto 90+3 ‘El Tiburón’ encuentra el empate en un remate de pierna derecha que Didier Moreno puede conectar en el área «blanca», luego de un remate de Carlos Bacca que se estrella en el vertical izquierdo.
