El cuarto día del paro indefinido que adelantan las comunidades serranas sobre la Troncal del Oriente, a la altura del puente amarillo de Río Frío, comenzó con un cambio en la dinámica del bloqueo.

Desde tempranas horas de la mañana se adoptó un esquema más flexible, con paso vehicular cada dos horas durante 15 minutos. Esta medida, impulsada por los líderes comunitarios, busca aliviar el impacto del cierre vial mientras continúan a la espera de compromisos firmes por parte del Gobierno Nacional.

Aunque la presencia del Ejecutivo central ha sido limitada, la jornada del miércoles dejó un primer resultado concreto tras la tercera mesa de trabajo. Representantes de la Alcaldía de Ciénaga, el Instituto Nacional de Vías y la Gobernación del Magdalena se comprometieron a disponer un total de 4800 horas máquina para intervenir los tramos más críticos de las vías terciarias en la Sierra Nevada, jurisdicción de Ciénaga.

Este compromiso responde a una de las principales demandas del paro. Las condiciones de las vías han impedido el traslado eficiente de productos agrícolas, lo que ha afectado directamente la economía local y el bienestar de las familias campesinas.

La distribución de las horas máquina quedó definida con 1.500 aportadas por la Alcaldía, 1.300 por Invías y 2.000 desde la Gobernación. Esta última porción dependerá de la aprobación de la Asamblea del Magdalena, que debe autorizar el uso de un superávit presupuestal de la vigencia 2024.

La implementación de estas labores se realizará en coordinación con las Juntas de Acción Comunal. Estas organizaciones ayudarán a definir los tramos prioritarios para garantizar que los trabajos se enfoquen en los puntos más deteriorados y estratégicos para la conectividad entre las zonas altas y bajas del municipio.

A pesar del avance en materia de infraestructura, los voceros de las comunidades manifestaron su inconformidad por la manera en que el Gobierno Nacional ha respondido hasta ahora. En la última reunión, solo asistió una funcionaria del Ministerio de Educación sin capacidad de decisión. Según los líderes del paro, esta falta de representatividad refuerza la sensación de abandono estatal, especialmente frente a los graves problemas educativos que enfrenta la región.

Para hoy se espera la llegada de los viceministros de Agua y del Interior. Las comunidades confían en que estas visitas puedan traducirse en compromisos más amplios y en la articulación de una respuesta institucional que incluya salud, educación, infraestructura y acceso a servicios básicos.

Por ahora el paro se mantiene. Los organizadores insisten en que no se levantarán de la vía hasta que haya soluciones claras y verificables. El llamado es a que el Estado asuma su responsabilidad con un territorio históricamente marginado que sigue esperando respuestas reales.