Después de varios días de suspensión, la Asamblea Departamental del Magdalena reanudó este miércoles su tercer período de sesiones ordinarias, en una jornada marcada por la presencia de 12 diputados y la incorporación de dos nuevos integrantes.
El único ausente fue el diputado Danilo Beltrán, quien continúa suspendido provisionalmente de su curul mientras avanza el proceso contra su credencial.
Uno de los primeros puntos abordados en la sesión fue la aprobación de las actas correspondientes a las sesiones de marzo y abril. La votación, realizada de manera nominal y pública, obtuvo ocho votos a favor, dos abstenciones —de los diputados César Pacheco y Pedro Mendoza— y dos votos negativos —de Edgar Arias y Yohan Pinedo—. Los diputados que se abstuvieron justificaron su decisión argumentando que no habían tenido el tiempo suficiente para revisar los documentos, prefiriendo evitar posibles errores en el trámite.
La plenaria también aprobó por unanimidad la modificación del calendario de varios debates de control político programados para este periodo. Según el nuevo cronograma, el debate sobre las comunidades de la Sierra Nevada se llevará a cabo el martes 4 de noviembre; el de titulación de predios, el 6 de noviembre; el de pobreza monetaria y multidimensional, el 12 de noviembre; y el de seguridad, el 18 de noviembre.
Durante la sesión se informó además que fue radicado el informe de ponencia del Proyecto de Ordenanza No. 134, “Por medio del cual se determinan las escalas salariales correspondientes a las distintas categorías de empleo del nivel central departamental para la vigencia fiscal 2025”. Este proyecto será debatido en la Comisión Segunda, con la diputada Rosta Jiménez designada como ponente.
La reanudación de las sesiones marca el retorno pleno a las actividades legislativas de la corporación, en un momento clave para el avance de temas estratégicos como la elección de la nueva mesa directiva, la elección del secretario general y la revisión del presupuesto departamental para la vigencia 2026. Además, la Asamblea del Magdalena retomará el ejercicio del control político sobre asuntos sensibles para el territorio, entre ellos la seguridad, la pobreza y la situación de las comunidades rurales.
