En el marco de su visita oficial a Pekín, el presidente Gustavo Petro formalizó la adhesión de Colombia a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, más conocida como la Ruta de la Seda, tras la firma de un memorando de entendimiento con el gobierno de China.
El acuerdo fue suscrito por la canciller colombiana, Laura Sarabia, y el presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China.
Con esta decisión, Colombia se suma a más de 20 países de América Latina que ya participan en esta plataforma global de cooperación impulsada por el presidente chino Xi Jinping. El memorando busca establecer una alianza estratégica en sectores como la economía, ciencia, tecnología, medio ambiente, cultura y procesos de reindustrialización.
Uno de los principales objetivos del acuerdo es reducir el déficit comercial con China, que actualmente ronda los 14.000 millones de dólares. Según el presidente Petro, esta alianza representa una oportunidad para aumentar las exportaciones colombianas hacia el país asiático y atraer inversión productiva. “Si logramos atraer hasta 10 mil millones de dólares anuales en capital chino, Colombia podría reducir su déficit fiscal y duplicar su capacidad de pago de deuda”, señaló durante su intervención en Pekín.
Entre los proyectos más ambiciosos del memorando destaca la propuesta de establecer una conexión de fibra óptica submarina entre Colombia y China. Esta infraestructura permitiría al país posicionarse como un nodo estratégico en el tránsito global de datos, y acercarse al ecosistema de la inteligencia artificial y las tecnologías del siglo XXI.
El acuerdo también incluye mecanismos de cooperación Sur-Sur, basados en relaciones horizontales, sin imposiciones políticas ni económicas, y con respeto a la soberanía de cada nación. Además, contempla iniciativas como el intercambio académico, becas para estudiantes colombianos en universidades chinas, y proyectos culturales conjuntos.
Desde el Gobierno Nacional se ha presentado esta firma como una oportunidad para diversificar las relaciones internacionales y potenciar el desarrollo del Litoral Pacífico colombiano. Sin embargo, el acercamiento a China también ha generado reacciones en distintos sectores por sus posibles implicaciones en la relación histórica con Estados Unidos, tradicional socio estratégico del país.
