En un paso significativo hacia la sostenibilidad energética, el Gobierno del Cambio, a través del Ministerio de Minas y Energía, entregó en Santa Marta la primera Comunidad Energética (CE) de Tenderos en la región Caribe. Esta iniciativa forma parte de la estrategia nacional Colombia Solar ¡Para Economías Populares!, cuyo objetivo es reducir el costo de la energía para los pequeños comercios.
Con una inversión de $42.000 millones, el proyecto beneficiará a 100 establecimientos en su primera etapa, ofreciendo ahorros de hasta el 50% en las facturas de energía eléctrica. La reducción de estos costos no solo aliviará a los comerciantes, sino que también tendrá un efecto directo en los precios de los bienes y servicios que ofrecen a la comunidad.
En la entrega, el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, destacó la importancia de ampliar esta iniciativa. «Este 2025 queremos pasar de 100 a 1000 tiendas en todo el país», afirmó Camacho, subrayando la meta de expandir el programa a más municipios, apoyado por las alcaldías y gobernaciones locales.
El proyecto, que financió en su totalidad la instalación de 100 sistemas solares fotovoltaicos, beneficiará a comercios en varios municipios de la región Caribe, incluyendo Santa Marta, Ciénaga, Barranquilla, y Montería. Los sistemas instalados permitirán un ahorro significativo de energía, con la instalación de 400 kWp en paneles solares, que se traducirán en una reducción aproximada de 69,40 toneladas de CO₂ durante el primer año.
Este proyecto es también una piedra angular en la estrategia de sostenibilidad del Gobierno Nacional, alineado con sus objetivos de reducción de emisiones de gases contaminantes. En su fase final, se espera que el programa permita disminuir 741,20 toneladas de CO₂ al año, favoreciendo la transición hacia fuentes de energía más limpias y accesibles.
La directora ejecutiva de FENOGE, Ángela Patricia Álvarez, resaltó que iniciativas como esta son fundamentales para la sostenibilidad del país y el fortalecimiento de la economía popular. «La energía renovable no debe ser un privilegio, sino una solución accesible para todos», concluyó Álvarez, destacando que este programa impacta positivamente tanto en la economía como en la cultura energética de las comunidades.
