Luis Díaz se convirtió en el protagonista del emocionante partido entre el PSG y el Bayern Múnich, anotando un doblete que parecía encaminar a su equipo hacia la victoria. Sin embargo, el colombiano abandonó París con la amarga carga de una tarjeta roja que opacó su brillante actuación en el encuentro, que finalizó 1-2 a favor de los alemanes.
Desde el inicio, el Bayern mostró su calidad, y sólo cuatro minutos bastaron para que Díaz brillara. Tras una rápida jugada que comenzó con Gnabry y un espléndido pase a Olise, el francés remató a puerta, pero fue Díaz quien estuvo atento al rebote y anotó el primer gol frente al campeón de la Champions League. Un comienzo perfecto que llenó de esperanza a los aficionados del Bayern.

El partido se tornó intenso rápidamente. A los 25 minutos, Dembelé tuvo que abandonar el campo, lo que evidenció las dificultades que enfrentaba el PSG. La primera parte estuvo llena de emociones, con oportunidades en ambos extremos. Gnabry impactó el palo en un intento poderoso, mientras que el veterano portero Neuer rechazó un mano a mano con Barcola, consolidando su estatus como clave defensiva del Bayern.
A medida que avanzaba el encuentro, Díaz se encargó de dar un nuevo golpe. En un momento de distracción de Marquinhos, robó la pelota y, con gran definición, anotó su segundo gol. A pesar de la euforia, el Bayern se encontró bajo presión al final del primer tiempo. En el minuto 45+2, Díaz, al intentar recuperar el balón, fue sancionado con una tarjeta roja tras una dura falta a Hakimi, una decisión desencadenada tras la revisión del VAR. La expulsión dejó al equipo con diez hombres y generó dudas sobre el desenlace del partido.

El segundo tiempo comenzó con el Bayern defendiendo su ventaja y, aunque el PSG intentó reaccionar, no logró concretar sus oportunidades. Los jugadores del Bayern, aún protestando la decisión arbitral, se unieron al esfuerzo defensivo para asegurar los puntos. La victoria del Bayern Múnich, aunque marcada por la expulsión de Díaz, resalta su potencial en competiciones internacionales y deja abierta la discusión sobre el futuro del colombiano en la cancha





