Un operativo conjunto de inteligencia de la Policía Nacional y la Dijín permitió la captura de los presuntos responsables del asesinato de la familia Lora, un crimen que sacudió al país a finales del año pasado.
La detención de los implicados fue confirmada por el director de la Policía, general Carlos Fernando Triana, quien anunció la captura de cuatro personas relacionadas con el brutal ataque ocurrido en un restaurante de Aguachica, Cesar, el 29 de diciembre de 2024.
El crimen dejó sin vida al pastor evangélico Marlon Yamith Lora, su esposa Yurlay Rincón, y sus hijos Ángela Natalia y Santiago Lora Rincón, quienes se encontraban almorzando en el establecimiento cuando fueron atacados por sicarios que llegaron en motocicleta.
Sin mediar palabra, los delincuentes abrieron fuego contra la familia y huyeron rápidamente del lugar. Este hecho conmocionó a la comunidad, especialmente por tratarse de una familia reconocida por su labor social y religiosa en la región.
La captura de los presuntos responsables se llevó a cabo en Cúcuta, donde fueron arrestados en las últimas horas. Las autoridades están evaluando la posibilidad de trasladarlos a Bogotá para continuar con las investigaciones y el proceso judicial.
De acuerdo con las indagaciones, el crimen habría sido planificado por un individuo que organizó el asesinato, mientras que otro coordinó los detalles logísticos, incluyendo la contratación de los sicarios y la elección del lugar del ataque.
Uno de los detenidos, quien aparentemente ya estaba preso, habría sido el «parrillero» de la moto, el hombre que disparó contra las víctimas. A él se le imputarán nuevos cargos por su participación en el crimen.
El general Triana resaltó la importancia de la labor de inteligencia que permitió ubicar a los responsables, quienes habían logrado evadir a las autoridades durante varios meses.
El asesinato de la familia Lora generó una ola de indignación en todo el país, debido a la brutalidad del acto y la trascendencia de la familia en la comunidad evangélica.
Las autoridades continúan investigando los motivos detrás del crimen, y aunque se maneja la hipótesis de un ajuste de cuentas relacionado con disputas territoriales entre grupos criminales, aún no se han establecido los detalles definitivos del móvil.
